La historia del Antiguo Egipto comienza en los años 3.500 a.C, sin embargo el Templo de Edfu, data del siglo II a.C. Esta “juventud” hace que el templo sea uno de los mejores conservados de todo Egipto y una atracción imperdible para cualquiera que visite la zona.
Se construyó cuando Egipto estaba gobernado por la dinastía Ptolomeo, tras la conquista por parte de Alejandro Magno en 323 a.C. Si bien los Ptolomeos eran griegos, imitaron las construcciones egipcias y quedó en la historia como una de las hazañas de construcción más impresionantes completadas durante esa época.
El Templo de Edfu, nombre que se gana por la ciudad en que está ubicado, está dedicado al dios halcón Horus y por eso también se lo conoce como “Templo de Horus”.
Edfu se encuentra a 109 kilómetros al sur de Luxor y 130 kilómetros al norte de Asuán, por lo que es una parada típica en un viaje entre estos dos principales centros del Alto Egipto.
Si quieres saber qué es lo que puedes ver en este magnífico templo, continúa leyendo que aquí te lo contamos.
¿Cómo llegar al Templo de Edfu?
Hay varias formas de llegar hasta la ciudad de Edfu para visitar el Templo de Horus:
- En tren: La forma más económica de viajar desde Luxor o Asuán, que no demora más de una hora y media, lo que lo hace perfecto para ir y venir en el día. Sin embargo, tiene dos desventajas: puede ir muy lleno y una vez que llegues a la estación de Edfu, deberás coger un taxi hasta la ciudad y su templo.
- En crucero: Hay muchas excursiones que recorren el río Nilo en crucero, y la mayoría de ellas incluye ciudades como Luxor, Asuán y Edfu. Aquí te dejamos algunas de las mejores.
- En taxi: Se pueden solicitar taxis fácilmente desde Luxor. Puedes aprovecharlo para combinar la visita al Templo de Edfu con el Templo de Khnum en Esna y el Templo de Kom Ombo.
- Excursión: La mejor forma de conocer el templo de Edfu es con una excursión que puede ser de un día, o de varios días recorriendo otros lugares. No solo no debes preocuparte por el transporte, sino que aprenderás a fondo sobre cada lugar que visitas.
La historia del Templo de Horus en el Alto Egipto
El Templo de Edfu fue construido sobre ruinas mucho más antiguas, que se remontan a Ramsés III.
Su construcción duró 180 años, por los que fueron gobernando diferentes faraones del período ptolemaico en Egipto. Este período representó una época de dominio griego; cada faraón era descendiente de Ptolomeo, un general del ejército de Alejandro Magno que tomó el control de la región unos siglos antes de la construcción del templo.
Sin embargo, el templo encarna la arquitectura tradicional del antiguo Egipto y está en gran parte libre de influencia helenística. El templo en sí está dedicado a la adoración del dios egipcio Horus, que se fusiona con frecuencia con el dios griego Apolo. De hecho, la ciudad de Edfu pasó a llamarse Apollonopolis Magna durante el dominio grecorromano en Egipto, y se convirtió en capital del segundo nomo del Alto Egipto.
Varias de las inscripciones encontradas en el Templo de Edfu describen lo que se conoce como el «Drama Sagrado». La historia describe el conflicto entre Horus, la deidad de las fértiles tierras egipcias cerca del Nilo, y Seth, la deidad del desierto egipcio circundante. Según el mito, esta batalla entre Horus y Seth ocurrió en ese mismo lugar, motivo por el cual levantaron el templo en su honor.
En el año 391 d.C. el templo quedó abandonado, ya que se prohibió el culto no cristiano por parte del Imperio Romano, y muchas de sus partes fueron incendiadas. Sin embargo, el abandono y el tiempo hicieron que el templo quede completamente enterrado más de 12 metros bajo la arena.
Fue recién en el año 1860 que el egiptólogo francés Auguste Mariette decidió desenterrar el templo, que gracias a la arena quedó en perfecto estado de conservación.

Construcción del Templo de Edfu reinado a reinado
La parte del templo en si mismo se inició en el 237 a. C., en el reinado de Ptolomeo II Euergetes I, y se completó en el 212 a. C. bajo su sucesor, Philopator.
La decoración de las paredes con relieves e inscripciones que se vio interrumpida durante el gobierno de Epifanes, se reanudó en 176 a.C. por orden de Filomentor. Esta decoración finalizó en 147 a .C, durante el reinado de Euergetes II, quien también añadió el gran vestíbulo y lo decoró con relieves en el año 122 a.C.
Durante los reinados de Ptolomeo IX Soter II y Ptolomeo X Alejandro I, se construyó la explanada con sus columnatas, los muros del recinto y el pilón. Luego, en el 57 a.C. durante el reinado de Ptolomeo XII Neos Dionisos, se decoró el pilón y se completaron las obras de construcción.
Qué ver en el Templo de Edfu
Siendo el segundo templo más grande e importante de Egipto después del Templo de Karnak, con solo llegar a sus puertas te quedarás sin aliento.
Descubre todo lo que puedes ver dentro de este enorme templo.
Entrada o Pilón del Templo de Horus
Las enormes paredes de piedra arenisca del templo están cubiertas de jeroglíficos gigantes e imitan la arquitectura de las épocas faraónicas anteriores. Uno de esos jeroglíficos es la representación de “el alivio de Neos Dionisos”, quien sujeta a sus enemigos por el cabello para golpearlos frente a Horus.
Una vez que atraviesas las puertas de 37 metros de altura y te metes por los pasillos gigantes y las diferentes cámaras, podrás sentir el poder de los gobernantes de aquella época.
Sala Hipetra (patio)
Atravesando las puertas del templo llegarás al patio de entrada, que está rodeado por 32 enormes columnas. Se dice que originalmente hubo un gran altar en el centro, donde los sacerdotes del templo hacían ofrendas a los dioses de Edfu.
Las columnas están rematadas con capiteles con diseños florales y de palmeras, y las paredes de piedra están cubiertas con relieves de los dioses Horus y Hathor. En las paredes que están tras las columnas seguirás viendo inscripciones que narran las historias mitológicas de la época. Por ejemplo, la victoria de Horus e Isis sobre Seth o los encuentros entre el dios Horus y la diosa Hathor, conocido como “El Festival del Bello Encuentro”.
En el patio también podrás encontrar una estatua de granito negro de Horus, que lleva la doble corona de Egipto y protege la puerta hacia el interior del templo.

Vestíbulo
Después de atravesar la Sala Hipetra y pasar por la puerta protegida por la estatua de Horus, se llega al vestíbulo. Esta cámara es de proporciones más pequeñas, con 12 columnas decoradas con capiteles de flores.
El vestíbulo del Templo de Edfu se divide en dos salas: el Salón de la Consagración a la izquierda y la biblioteca del templo a la derecha. En el primero encontrarás las paredes decoradas con un relieve representando a Horus y Thoth derramando agua sagrada al faraón; en la biblioteca, el relieve muestra una lista que indica los libros que alguna vez se guardaron allí, junto con una representación de Seshat, la diosa de la escritura.
El techo del vestíbulo se encuentra quemado desde la época en que los cristianos incendiaron todo vestigio religioso que no tenga que ver con el cristianismo.
La puerta que conduce a la siguiente sala contiene un relieve de la barca solar, guiada por dos figuras de Horus con cabeza de halcón, con el sol adorado por Thoth y Neith. A los lados, están Ptolomeo IV Philopator y los Cuatro Sentidos; a la izquierda el gusto y la razón, y a la derecha la vista y el oído.
Salón Hipóstilo
En el salón hipóstilo verás nuevamente dos hileras de columnas, sosteniendo un techo con relieves astronómicos y representaciones del cielo.
Una de las cuatro pequeñas salas de ofrendas que verás aquí, era el laboratorio donde los sacerdotes mezclaban el incienso para los rituales. Y también es el lugar donde están las fórmulas de las esencias y ungüentos egipcios que se usaron para crear los perfumes de hoy en día.
Sala de ofrendas
Cuando atravieses el Salón Hipóstilo llegarás a la Primera Antecámara, lugar que los sacerdotes del templo empleaban como altar y dejaban ofrendas a los dioses. Verás una escalera hacia el techo, pero lamentablemente no se puede acceder allí.
Continuando el camino llegarás a la Segunda Antecámara que también cuenta con un pequeño patio de ofrendas.
Santuario
Finalmente llegarás a la parte más importante del Templo de Edfu, el santuario del dios Horus. Iluminado por tres pequeñas aberturas cuadradas en el techo, aquí era donde estaba la estatua dorada de Horus sobre el santuario de granito que aún se puede apreciar. Éste santuario de granito es la reliquia más antigua del templo, ya que fue dedicada por Nectanebo II, faraón que gobernó entre los años 359 a 343 a. C
Deberás seguir el pasillo que recorre el santuario a través de varias cámaras decoradas con relieves de colores. Entre los destacados, verás a Philopator adorando a Horus, Hathor y sus padres deificados en el santuario.
En la cámara que se encuentra al norte, verás una réplica de la barca de madera (la original se puede ver en el Louvre de París), que habría sostenido la estatua dorada de Horus en festivales y procesiones. La cámara de la izquierda acoge a la Sala de Lino, que contiene las capillas a Min y el Trono de los Dioses. A la derecha está la Capilla de Año Nuevo, con un impresionante relieve de la diosa del cielo Nut, estirada a través del techo.

Pasaje de la victoria
El Pasaje Interior corre alrededor de la mitad trasera del templo, se ingresa desde el Salón Hipóstilo y está decorado con relieves e inscripciones. Merece la pena dedicar un tiempo a recorrerlos y admirar los relieves de la pared, que representan las batallas entre Horus y el dios del inframundo, Seth, representado por un hipopótamo.
Nilómetro
Los antiguos egipcios usaban nilómetros para medir la altura del río y ayudar a predecir la cosecha de la temporada futura. El Nilómetro del Templo de Edfu se encuentra tomando una escalera subterránea que está en el lado este del Pasaje Interior .
Aunque ya no está conectado con el Nilo, se puede ver el pozo con las profundidades inscritas en egipcio demótico.
Mammisi
Al oeste de la entrada del Templo de Horus está el Mammisi o Casa de Nacimiento construido por Ptolomeo VIII Euergetes II y decorado con relieves de Ptolomeo IX Soter II.
Esta estructura fue el lugar del Festival anual de la Coronación, que representó el nacimiento divino de Horus y el faraón reinante. Detrás del edificio verás relieves de Horus amamantados por Isis.
Horarios y precios
El Templo de Edfu está abierto todos los días de 9 a 17 hrs y el precio es de alrededor de 2,15 euros.
La entrada al complejo del templo tiene un centro de visitantes que te venderá el ticket de entrada, así como varios comercios para comprar recuerdos.
Qué ver alrededor del Templo de Edfu
Puedes aprovechar el viaje para visitar los lugares cercanos que leerás a continuación.
Ciudad Antigua
Un poco más al oeste del templo, verás montículos de escombros que marcan el sitio de la antigua ciudad. Varias excavaciones arqueológicas aquí han recuperado los edificios grecorromanos que se encuentran debajo de las casas que se construyeron en los períodos del imperio bizantino y árabe.
Ciudad de Edfu
Edfu es una importante ciudad comercial de la zona y tiene una industria azucarera y una antigua industria cerámica establecida. Es un lugar bullicioso, con un par de hoteles, restaurantes que sirven platos típicos egipcios y un pequeño zoco turístico cerca de la entrada del templo.
No hay mucho más para ver en la ciudad, con lo cual no te llevará mucho tiempo recorrerla y podrás aprovechar la excursión de un día.