Construida originalmente en estilo románico, la Catedral de Lisboa, también conocida como Sé de Lisboa, se presenta como una de las visitas imprescindibles de cualquier viaje a Lisboa.
Ubicada en el famoso barrio de Alfama, este templo originario de mediados del siglo XII es una de las pocas estructuras que ha sobrevivido a los diversos incendios e terremotos que asolaron a la ciudad de Lisboa a lo largo de su historia.
Si estás preparando tu viaje a la capital portuguesa y buscas información para visitar la Catedral de Lisboa, sigue leyendo y te contamos todo lo que debes saber al respecto.
Sobre la Catedral
La catedral cuenta con el aspecto austero característico del estilo Románico bajo el que fue diseñada originalmente, aunque la realidad es que las diversas obras y reformas que fue sufriendo a lo largo de su historia la dotaron de una suerte de eclecticismo arquitectónico que ha sabido encajar con especial carácter.
Su exterior cuenta dos torreones que actúan como campanarios apoyados sobre sus gruesos muros, otra firma característica de los templos románicos. El rosetón central que se encuentra sobre la entrada principal es la entrada de luz más importante de la catedral. Su presencia a nivel estético define a la estructura como un templo, alejándolo de lo que a priori podría parecer un pequeño castillo o fortaleza medieval.
El interior de la Catedral de Lisboa, de planta central, cuenta con algunos elementos puramente decorativos que contrastan con la imagen de austeridad que desprende el templo en general. Algunos de estos elementos son la pila en la que fue bautizado San Antonio de Padua, algunos sarcófagos del siglo XIV o una llamativa capilla gótica del siglo XIV.
¿Qué ver una vez allí?
El Claustro de la Catedral de Lisboa
De estilo arquitectónico similar al del Monasterio de los Jerónimos (otra de las visitas obligadas de cualquier viaje a Lisboa, donde se encuentran los restos de Vasco da Gama), el claustro de la Catedral de Lisboa se construyó unos siglos más tarde que el templo, más precisamente en el siglo XIV.
La entrada al claustro no está incluida en la entrada a la catedral (que es gratuita), sino que deberás pagar una entrada aparte para poder acceder a él. A menos que viajes con un presupuesto muy ajustado, te recomendamos no perderte esta visita.
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Ruinas
Si bien el templo se comenzó a construir en el siglo XII, el lugar en el que se encuentra cuenta con una historia que va mucho más allá del año 1.500. Esto se puede apreciar en los restos romanos, árabes y medievales que han ido saliendo a la luz a lo largo de las últimas décadas para dar forma así a la historia completa de la ciudad de Lisboa.
Si visitas la catedral, no dejes de conocer estas ruinas históricas.
El tesoro de la Catedral de Lisboa
El último de los puntos destacados que ver en la catedral es su tesoro. El mismo se encuentra en la sacristía, ubicada en la parte superior de la Catedral de Lisboa.
Este tesoro, que se encuentra expuesto en cuatro salas en las que podrás contemplar diversas piezas como trajes, joyas y reliquias de distintas épocas, no es otra cosa que los restos de San Vicente, el patrón de Lisboa. Según cuenta la leyenda, el ataúd de San Vicente fue acompañado por dos cuervos mientras era trasladado a la ciudad, razón por la que estas aves forman parte hoy en día del escudo de la capital portuguesa.
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Horario, precio e información útil de la Catedral de Lisboa
Horario
El templo tiene horarios específicos para las visitas turísticas, que detallamos a continuación:
- De noviembre a abril:
- Lunes a sábado de 10:00 hs a 18:00 hs.
- Domingos y festivos, cerrado.
- De mayo a octubre:
- Lunes, martes, jueves y viernes de 9:30 hs a 19:00 hs.
- Miércoles y Sábados de 10:00 hs 18:00 hs.
- Domingos y festivos, cerrado.
Precio
- Catedral: Entrada gratuita.
- Claustro: 2,50 €
- Acceso al tesoro: 2,50 €
- Claustro y tesoro: 4 €
- Estudiantes y carnet joven: 50% de descuento.
- Menores de 11 años: entrada gratuita.
Cómo llegar
La Catedral de Lisboa se encuentra ubicada en Largo da Sé, 1100-585. Para llegar hasta allí cuentas tanto con el tranvía (líneas 12E y 28E) como con los autobuses, 10B, 208, 714, 736, 737 y 760.
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¿Qué otras cosas ver cerca de la catedral?
Si quieres que la catedral forme parte de un recorrido por otros de los puntos destacados de la ciudad es importante saber qué cosas tiene cerca. En este caso, en un radio menos a 600 metros podrás encontrar la Plaza del Comercio, el Castillo de San Jorge, la Alfama, el Elevador de Santa Justa (encuentra más info sobre este elevador en nuestro artículo sobre el elevador y los funiculares de Lisboa).
Así mismo, si planeas visitar varias atracciones de la ciudad, considera adquirir la Lisboa Card, con la que podrás acceder a más de 30 de las principales atracciones de la ciudad y viajar de forma ilimitada en el transporte público de la ciudad. Si quieres más información sobre esta tarjeta turístico, hace un tiempo escribimos una reseña con sus principales ventajas para analizar si vale la pena la Lisboa Card o no.
Hasta aquí llegamos con esta pequeña guía de visita a la Catedral de Lisboa. Esperamos que este artículo te haya gustado y te sirva para planificar tu visita al templo más grande, antiguo e importante de la ciudad de Lisboa. Si te sirvió, y crees que puede ser útil también a otros viajeros, ¡no dejes de compartirlo!
¿Has visitado alguna vez la catedral de Lisboa? ¿Qué te ha parecido? ¿Recomendarías una visita? Déjanos un comentario aquí abajo y cuéntanos tu experiencia.
